Las vacaciones ya están a la vuelta de la esquina y todos sabemos lo que significa. Descansar, pasear y comer lo que se nos antoje. En ese momento no nos importa comer de todo, incluso postres, el remordimiento llega cuando terminan esas dos semanitas de descanso y nos damos cuenta de los kilitos de más que ganamos.
Para que esto no te pase te daremos unos consejos que te ayudaran en estas vacaciones. Conservarás tu figura sin dejar de disfrutar de la comida.
Satisfecho, no lleno: Es común y normal que cuando vamos a comer a los buffets de los hoteles, queremos probar y comer de todo, así que la recomendación es, servirte de todo un poco, pero en porciones pequeñas así de esta forma no daremos una segunda vuelta a las charolas de comida.
En el mar la vida es más sabrosa: Si tu plan es ir a descansar a la playa, aprovecha para comer pescados, ya que tienen una cantidad mínima de grasa la cual le ayuda a tu corazón (siempre y cuando sean preparados en seviche o a la plancha).
Equilíbrate: Los planes nocturnos casi siempre significan comer mucho y de todo, así que si estás consiente de eso solo desayuna y come ligero antes de ir a cenar, de esta forma tu estómago comenzara a pedirte comida sin sobrecargarlo.
¡A mover las masas!: El estar de vacaciones no significa que dejes de hacer ejercicio, así que busca una actividad física que realizar al menos por 30 min. Como caminar en las mañanas por la arena del mar, dar una vuelta a algún mercado, nadar, etc.
Procura no tomar alcohol: No solo le hace daño a tu organismo, también engorda. Ahora que, si se te antoja un trago, procura tomarlo con agua mineral o busca bebidas naturales como jugos o agua de coco.
Disfruta de tus vacaciones para que tu cuerpo pueda relajarse y recargarse de energía positiva.
Escrito por: Fernanda Alatriste | Equipo de Comunicación Omega®
Fuente: Salud 180